“No es lo mismo pasar ocho horas en una sala oscura, gris y desordenada que en una habitación luminosa con una decoración cuidada”.
Los diseños de lugares de trabajo colaborativos que se centran en el bienestar de los empleados se han convertido en la nueva norma en un lugar de trabajo posterior a la pandemia. El aumento de la productividad y de la motivación o la disminución del estrés son algunos de los beneficios que las empresas han obtenido al invertir en un espacio de trabajo que satisface las necesidades de sus empleados.
Por ejemplo, la creación de espacios cómodos y abiertos que generen encuentros casuales entre trabajadores de distintas áreas pueden ser un motor importante de innovación dentro de la empresa. Cada vez son más las organizaciones que crean espacios de trabajo que inspiren a las personas a ser creativas e interactuar entre sí de manera positiva.
Claves para que el espacio de trabajo sea el adecuado: tres formas de despertar la creatividad
El proceso creativo de cada uno es diferente. Por eso es importante ofrecer a las personas una variedad de espacios donde puedan reunirse y hacer un poco de ruido durante las sesiones de lluvia de ideas o aislarse para resolver un problema complicado tranquilamente y en soledad.
Favorecer una cómoda colaboración
Una variedad de entornos comunitarios presentes a lo largo del edificio invita a las personas a reunirse o charlar de forma distendida. Cuando las personas se sienten cómodas es más probable que compartan ideas y se ayuden mutuamente a resolver problemas, dos excelentes formas de impulsar la innovación.
Las salas de descanso claustrofóbicas en los rincones más alejados de un edificio son cosa del pasado.
“Cuando las personas se sienten cómodas es más probable que compartan ideas y se ayuden mutuamente a resolver problemas”
Muchas empresas han diseñado espacios de trabajo abiertos donde las personas se sienten más en casa, bienvenidas y libres para conversar entre sí. Una idea popular es una configuración de oficina conocida como “hot-desking” o escritorio compartido. Este diseño se basa en el concepto de que nadie tiene un escritorio asignado. En cambio, hay espacios de trabajo abiertos donde todos son libres de instalarse y moverse como quieran.
Es un modelo que funciona entre las organizaciones que tienen parte de la plantilla trabajando algunos días de forma remota y otros en la oficina.